No digo que el amor no exista, solo digo que no quiero nada él...
Es por eso que el matrimonio que mis padres arreglaron para mí desde la cuna parece una apuesta segura. Libby es un tipo de mujer obediente y bien entrenada que será fácil de controlar y mantener justo donde la quiero; en mi cama y fuera de mi corazón.
O eso supuse erróneamente.
Este pequeño petardo no está yendo tan bien como esperaba y se niega a casarse conmigo, como si no fuera la captura del siglo. Bueno, se lo mostraré. Tengo que hacerlo, porque ahora que no puedo tener lo que siempre he asumido que sería un trato fácil, la quiero más.
¿Dicen que siempre quieres lo que no puedes tener? Soy Cole Riley, CEO, playboy, prometido despiadado.
Pondré mi anillo en el dedo de Libby y a ella en mi cama, incluso si tengo que hacerle un trato que no puede rechazar.
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